- ALINEARNOS CON NUESTRO PROPÓSITO
- Imagina una vasija de barro… Lo que genera utilidad a una vasija no es la materia que la forma, si no el vacío que posibilita ser llenado. De la misma manera, nosotros somos como una vasija. Si tenemos nuestra mente nuestra emoción y nuestro cuerpo llenos de la nostalgia del pasado o de las expectativas del futuro, hemos llenado nuestro potencial y espacio disponible para el presente.
- “La disponibilidad del espacio” genera la posibilidad de que nuestro propósito nos encuentre, y la atención en la presencia, nos informa plenamente de lo que queremos hacer en cada momento. Si nos entregamos a ese espacio, se desenvolverá alineado con la acción correcta. De la misma manera, es más sencillo remar siguiendo la corriente o escuchar el viento para que impulse nuestras velas en la dirección adecuada.
- El sentido a la respuesta emocional que este encaje proporciona, es estar fluyendo con la vida. Cuantas veces nos resistimos a fluir con la vida…
- Preguntémonos ¿qué nos lo impide?:
- ¿El querer o el deber.?
- PERLA DE ATENCIÓN: Intenta no quedarte anclada en la emociones del pasado, no te resistas a los cambios. Cada momento es único y está lleno de oportunidades nuevas, si te alineas con tu propósito real, es decir, lo que tu corazón sabe ya, encontrarás el sentido de todo lo que te está aconteciendo. (Vacíate para recibir)
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